El corresponsal de Europe 1 señala en radiocable.com que no entiende por qué hay tanta indignación ante la posibilidad de que haya una figura que presencie o medie en los debates entre gobierno central y catalán. Considera que sería una medida que podría ayudar a «descrispar» la situación, aunque cree que debe ser una persona española. Y que en cualquier caso afirma que no ve ninguna cesión por parte de Madrid, ni «ninguna línea roja traspasada». Henry de Laguerie, que también colabora con La Depêche du Midi o RTBF, señala que le parece «fuera de lugar» convocar una manifestación por ello y que la reacción le parece «excesiva», «ridícula» y que es otro ejemplo de la histeria que se ha apoderado del debate político en España y en el mundo. Aunque advierte de que en un momento en el que «parece que la gente quiere votar lo más radical», es posible que el «catastrofismo de la oposición» le sea beneficioso.

Henry de Laguerie considera que la polémica en torno a la figura del «relator» es: «otro ejemplo de la `histerización´ del debate político en España y en el mundo. Cada día tiene que haber una polémica y nos tenemos que indignar por cualquier cosa y con unas redes sociales que lo multiplican. Es todo muy excesivo. Hay un nivel de crispación y hay tanta indignación con esto que te preguntas qué pasará cuando haya algo grave. Que la gente esté espantada porque entre dos administraciones entre las cuales sabemos que todo es muy difícil, que haya la posibilidad de que alguien esté y presencie unos debates, yo no veo cual es el problema. Es una polémica excesiva, ridícula y demuestra que hay una ganas de enfrentamiento que no entiendo».

Añade: «Dialogar es lo que se da entre gente que no está de acuerdo. Es evidente que entre Madrid y los independentistas hay enfrentamiento. Si una figura ayuda a que se descrispen… no lo veo tan mal. Convocar una manifestación sólo por esto, creo que está fuera de lugar. No veo en qué ha cedido Madrid. Cataluña sigue siendo una comunidad autónoma, igual que hace 10 años o mañana. La independencia es totalmente imposible a corto plazo. No veo porqué la gente se espanta.»

El corresponsal también valora lo que implica esta «sobrerreacción» y si puede beneficiar o perjudicar a PP y Ciudadanos: «Se está perdiendo totalmente el sentido de las palabras, ya sea Puigdemont o Casado. Porque si esto es el mayor golpe a la democracia desde el 23F… ya todo vale. Creo que esto les hace perder credibilidad, pero sólo de cara a la poca gente que sigue siendo razonable en España. Y perdona, pero soy muy pesimista. No solo es en España, en Europa pasa igual. En Francia, con los chalecos amarillos, se sobrerreacciona. Y aunque pierdan credibilidad eso no quiere decir que les afecte electoralmente».

Henry de Laguerie señala otras dos derivadas: «Estamos en un momento en el que parece que la gente quiere votar para lo más radical y excesivo. Y la gente que intenta tender puentes, pierde. En la crisis con Cataluña, al PSC casi nadie le escucha, en Madrid, Pedro Sánchez está muy debilitado. Parece que a nadie le interesa resolver el conflicto. Y mientras estemos en un país en el que parece que la Guerra Civil no ha acabado, es posible que el catastrofismo de la oposición le sea beneficioso. Aunque creo que hay que tomar en cuenta el factor Vox. Y no sé si imitando a Vox, conseguirás más votos. Creo que la gente votará a Vox».

En cuanto a si la figura del relator o mediador, analizada sin ruido, podría ayudar en la crisis catalana, el periodista francés asegura: «El problema es que se analiza todo en un tiempo muy corto. La resolución del conflicto catalán no se hará ni en una semana, ni en un año. Es un trabajo de muchísimo tiempo. Y cualquier medida, aunque pequeña es bienvenida. Los independentistas pusieron el grito en el cielo cuando el gobierno planteó cambiar el nombre del aeropuerto de El Prat por el de Tarradellas. ¡Claro que era un paso simbólico! Pero cuando hay un conflicto tan grave, hay que empezar por las cosas que unen, que son muy pocas. Pero hay algunas simbólicas que pueden unir. Bienvenidas sean»

Y en este contexto enmarca la posible figura del «relator» o alguien que medie en el conflicto, aunque considera que «tiene que ser una persona española y se tiene que resolver dentro del país. Pero parece que cada parte quiere aplastar a la otra. Puigdemont y Torra no quieren oir otra cosa que independencia sí o sí, y la oposición española solo quiere aplastar y destrozar al independentismo. Es evidente que con esta actitud no se llegará a ningún sitio. Por eso saludo el esfuerzo, aunque sea con interés y por supervivencia política, del gobierno español, como mínimo, por mejorar la situación. Y no veo que haya traspasado ninguna línea roja.»

Henry de Laguerie es corresponsal en España de la radio francesa Europe 1 desde 2009. También es colaborador de la RTBF o Radio Canadá y escribe para La Depêche du Midi y ocasionalmente para Le Parisien. En diciembre de 2014 recibió el premio internacional Omnium Cultural. En su trabajao como corresponsal ha cubierto la actualidad política en España y especialmente en Cataluña -donde ha denunciado haber sido presionado por la Generalitat-, asi como la economía española y asuntos empresariales como el “redespegue de Iberia” o la inauguración de la interconexión eléctrica entre España y Francia.

Print Friendly, PDF & Email