Pasado el impacto de las imágenes violentas del 1-O, la inmensa mayoría de los grandes medios de comunicación globales sigue observando de cerca el conflicto en Cataluña pero resaltando los numerosos matices grises que complican los análisis… y lamentando la «intransigencia» de las dos partes que podría abocar a España a una crisis aún más grave si no hay diálogo. Esa es al menos la idea que transmiten en sus editoriales. Se destaca que la violencia policial ha aumentado las simpatías hacia los independentistas catalanes, pero se enfatiza que éstos «no deberían cantar victoria» porque fuera se tiene claro que el conflicto territorial es «considerablemente más complejo» y «ninguna de las dos partes tiene toda la razón».

De hecho en general se advierte al gobierno de Puigdemont de que una declaración unilateral de independencia sería considerada «irreflexiva», sin base  y nadie la reconocería en Europa y EEUU. Pero sobre se resalta que, desde el exterior, se ven potenciales soluciones políticas a la crisis y se pide al gobierno español y al catalán que salgan de su «intransigencia», den un paso atrás y se sienten a negociar un acuerdo autonómico.

Financial Times pide a los independentistas que den un paso atrás porque el diálogo y no una DUI son necesarios. Destaca que los líderes catalanes están sugiriendo que pueden declarar la independencia en los próximos días. Pero advierte de que sería «una acción irresponsable sin validez legal no legitimidad política». Y añade que además se encontraría con una «gélida respuesta» de los aliados de España en la UE y EEUU. Sostiene que la «primordial necesidad ahora mismo» en España es que el gobierno central y el regional de Cataluña abran un contacto para intentar calmar las tensiones. Y apunta asimismo que «idealmente» estos contactos desembocarían en un diálogo que incluyera a los partidos de la oposición para intentar actualizar los acuerdos autonómicos.

The New York Times advierte de que la crisis solo puede empeorar si los dos líderes se mantienen tan intransigentes. El editorial titulado «Chaos in Catalonia» sostiene que aunque Rajoy tenía la ley ampliamente de su parte, la gestión del 1-O ha hecho que los independentistas tengan la solidaridad y simpatía internacional y que el presidente español parezca un «matón intransigente» que hace más remota la posibilidad de una resolución política del conflicto. Pero señala que a nivel internacional hay un cierto consenso en contra de romper un estado que cumple la ley y respeta los derechos humanos como es España. Por eso avisa que la crisis podría ponerse aún pero si los respectivos líderes no dan un paso atrás: las tácticas de manos dura españolas sólo traerán más apoyo para los independentistas, pero una DUI «irreflexiva» y basada en un apoyo imposible de calibrar solo generará más caos y conflicto. Y sostiene que hay «soluciones políticas potenciales» aunque éstas se mantendrán inalcanzables si Rajoy y Puigdemont se mantienen «intransigentes».

Washington Post advierte de que el «camino correcto» no es la DUI y el 155 sino lo que piden todos desde fuera: una negociación  autonómica. Su editorial que lleva por título «Cataluña celebró un referéndum. Rusia gana», considera que las imágenes de policías antidisturbios disparando pelotas de goma y cargando contra votantes el 1-O dió a los independentistas el «relato perfecto». Pero advierte de que la crisis en España es «considerablemente más complicada» porque la mano dura de Rajoy fue en respuesta al temerario e irresponsable movimiento de los nacionalistas catalanes de crear un estado independiente violando la ley y posiblemente en contra de la mayoría de los catalanes. Añade que la «fría respuesta» de los líderes de la UE en apoyo de Cataluña y el rechazo de EEUU debería hacer que Puigdemnt atemperara sus ambiciones. Señala que solo apoyan la independencia catalana la Escocia gobernada por separatistas, el «gobierno paria» de Venezuela y Rusia que lo ve como una manera de dividir a Occidente. Y considera que «el camino correcto» no es la DUI y el 155, sino el que están pidiendo «virtualmente todas las autoridades responsables fuera de España»: una negociación autonómica, aunque lamenta que ninguna de las partes parece quererla.

The Times sostiene que Rajoy debe trabajar para alcanzar un acuerdo en Cataluña o echarse a un lado. En un editorial titulado «Blood in Barcelona» sostiene que el presidente español falló en la misión que tenía antes del 1-O de convencer a los «catalanes no-fanáticos» de que están mejor siguiendo dentro de España que apostando por un estado con una independencia «caóticamente realizada e internacionalmente rechazada». Y añade que de hecho Rajoy debería preguntarse si su «brutal política policial» no es causa suficiente para una dimisión. Y señala que si el presidente español no es capaz de encontrar una salida negociada a la crisis en Cataluña debería dimitir.

Le Monde pide a a Rajoy y Puigdemont que «salgan de la política de lo peor» para evitar una crisis mayor. El editorial del diario galo señala que aunque Rajoy tenía «todas las buenas razones para oponerse al 1-O que «no respetada en nada las normas de un consulta admisible en la UE», la imágenes de una policía interviniendo, a veces brutalmente, para impedir votar han alentado la causa independentista. Pero advierte de que Puigdemont «no debería cantar victoria» porque si declara la independencia con una abstención del 60%, ningún estado de la UE y fuera lo reconocerá. Y señala que es necesario volver a una negociación sobre la autonomía de Cataluña, lo que implica que Puigdemont retome el contacto con la realidad y que Rajoy salga de la postura reduccionista para entrar en la complejidad del caso catalán.

Süddeutsche Zeitung considera que en el conflicto entre Madrid y Barcelona ninguna de las dos partes tiene razón. Su editorial resume así la situación que se vive en España. Advierte de que el gobierno de Mariano Rajoy se equivoca si cree que puede acabar con un movimiento de masas democrático con multas y pelotas de goma, pero también señala que el presidente de la Generalitat Carles Puigdemont no tiene legitimidad para promover la secesión, con sólo el 48% de los votos.

Wall Street Journal critica que los independentistas catalanes pidan ahora una mediación para resolver el problema que han creado. Su editorial se titula «La guerra de secesión española» y empieza con una contundente crítica al 1-O que considera un «hito» como «treta política destructiva», añadiendo que tras ganar el referéndum «con baja participación y represión policial», los independentistas piden ahora una negociación para resolver «el problema que han creado». Sostiene que los separatistas son minoritarios en una región que ya disfruta de una «considerable autonomía» política, económica y cultural. En este sentido considera que Rajoy «tiene la obligación de defender» la Constitución española y debe «evitar caer en la trampa» de los independentista que piden una mediación que «reforzaría la idea de que tienen una causa legítima sobre la que mediar cuando no la hay».

Advertencia: Por respeto a la ley L.P.I. española, radiocable.com ni reproduce textualmente ni publica links a los textos externos que han llamado la atención de nuestro equipo. Si desea conocer la literalidad del artículo acuda directamente al medio referido. 

Print Friendly, PDF & Email