Grecia tendría un centro secreto y extrajudicial al que envía a refugiados e inmigrantes irregulares antes de expulsarlos a Turquía y además retiene en un buque en Lesbos a 500 personas para deportarles. Es lo que denuncian el diario estadounidense y el semanario alemán, dos de los medios internacionales más prestigiosos. El gobierno griego ha negado ambas acusaciones, pero el foco sigue puesto en la forma en la que está tratando la reciente oleada de refugiados que han llegado a sus fronteras.

El Gobierno griego encierra a inmigrantes y refugiados en centros secretos, en donde se les golpea y despoja de sus pertenencias, sin registrar sus datos personales y sin permitirle el acceso a abogados para luego enviarles de regreso a Turquía. Es lo que denuncia una reportaje de investigación del New York Times titulado «El lugar secreto de los griegos para los refugiados: Somos como animales».

El diario cita como fuentes a refugiados a los que ha entrevistado que explican cómo tras ser detenidos por las autoridades griegas, les enviaron a estos centros secreto donde les quitaron por la fuerza todas sus pertenencias, incluidas sus ropas, los golpearon y luego les deportaron a Turquía sin ninguna acción legal. El NYT apunta que el análisis forense de sus imágenes satélites e informes in situ verifican la presencia de un centro secreto en el noreste de Grecia. Y añade que el grupo de investigación suizo Respond también confirmó la presencia de este centro sin jurisdicción.

El gobierno griego ha negado la denuncia del rotativo estadounidense. Su portavoz Stelios Petsas ha asegurado que «en Grecia no hay centros secretos para presos», añadiendo que «se cumple la Constitución», y se resuelven de manera «transparente» todos los problemas relacionados con la protección de las fronteras y la seguridad del país. Y de momento la UE ha evitado condenar estos centros, escudándose en que es competencia nacional investigar las denuncias.

Pero otro gran medio internacional, el semanario alemán Der Spiegel, ha sembrado más dudas sobre la actuación de Grecia en esta nueva crisis de refugiados al publicar videos que comprometen la actuación de sus agentes. Por un lado han difundido las imágenes dentro del buque militar que retiene a cerca de 500 personas en Lesbos -entre ellas, niños y mujeres embarazadas- a los que luego transfieren al continente para deportarles. Y además han publicado otro video en el que se ve a policías griegos enmascarados subiendo a decenas de inmigrantes a un bote y enviándoles a la fuerza a un área en Turquía, cerca de la frontera. Citan además a varios oficiales de policía y soldados griegos retirados y en servicio que confirmaron a los reporteros que han estado realizando «devoluciones» en la frontera greco-turca durante años.

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