Luis García Montero recuerda al poeta Marcos Ana en La Cafetera

El poeta Luis García Montero recordó al recientemente fallecido y también poeta Marcos Ana en La Cafetera de radiocable.com: «Representó la bondad y la dignidad». Marcos Ana, afirmó García Montero, «siempre dijo que su primera lucha fue que no consiguieran convertirlo en un personaje perverso y con odio, sino que mantuviese la bondad de la vida».

Luis García Montero (entrevista a partir del minuto 08:00; duración 10:08) le conoció «a principios de los años 80 en casa de Rafael Alberti». «Estaba haciendo mi tesis sobre Rafael Alberti y mi amistad con Rafael supuso también conocer a sus amigos», dijo. García Montero contó: «Tengo el recuerdo muy vivo de algunos viajes que hicimos con Rafael por Europa del este, por Praga, Alemania del este, Rumanía,…».

«Era un personaje muy conocido», afirmó García Montero. En esos mismos viajes, recordaba: «Cuando hacíamos escala en algunos sitios enseguida había una delegación que venía a saludar a Rafael y a Marcos Ana, sobre todo compuesta por antiguos militantes de las Brigadas Internacionales, y que tenían a Alberti como el poeta que representó la lucha contra el golpe franquista y a Marcos Ana como representante de los presos políticos».

«A partir de los años 80 tuve mucha relación con Marcos», dijo Luis García Montero.

«Marcos Ana era un muchacho en 1939 cuando, al final de la guerra civil, lo detienen, y en la cárcel está durante 23 años», contó Luis García Montero. «Fue uno de los presos políticos de más larga duración en España», aseguró.

Marcos Ana, dijo Luis García Montero, «fue militante del Partido Comunista desde muy joven y ha muerto con el carnet del Partido Comunista». «Marcos insistió en que tener ideas y una militancia no significaba ser sectario sino estar abierto al diálogo», añadió. «Dentro de la izquierda fue ejemplo de firmeza, de persona dialogante y un símbolo de todos», destacó.

Fue durante esos 23 años en la cárcel cuando «se hizo poeta y publicó el libro ‘Poemas desde la cárcel’ en 1960, que desató un movimiento de solidaridad internacional porque se convirtió en el símbolo de lucha contra el franquismo», señaló García Montero.