El corresponsal de Les Echos ha analizado la polémica provocada por la ubicación del cementerio de residuos nucleares en España con una mirada francesa. Gilles Sengès explica para radiocable.com que nuestro país ya ha pagado muchísimo dinero por el almacenamiento en suelo galo y que si no soluciona el problema va a pagar aún más. Además avisa que el gobierno tendrá que buscar una alternativa ya que está prohibido que este consorcio guarde residuos nuclares extranjeros indefinidamente.

Gilles Senges

Gilles Sengès explica que España paga un alquiler desde hace más de 15 años por tener sus residuos en Francia. Sin embargo a finales de este año termina el contrato y si los residuos siguen alli, el gobierno tendrá que pagar a Areva, la empresa que gestiona el ATC de Le Hague. Además el corresponsal asegura que España tendrá que encontrar una solución a este problema, ya que Areva tiene prohibido «guardar residuos extranjeros españoles, alemanes o japoneses indefinidamente».

Sengès asegura que en Francia hay en general menos oposición a la energía nuclear que en España, pero también hubo protestas en La Hague cuando se instaló el cementerio . Sin embargo es un lugar de Normandia «casi desértico, no había ninguna empresa y ahora la gente está cómoda con el ATC».

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