La arbitrariedad de las fuerzas de seguridad que ONGs como Amnistía Internacional viene denunciando desde que se aprobó la «Ley Mordaza» hace 5 años,  continuado durante el confinamiento y el estado de alarma. Y en concreto han registrado y documentado en un informe,  61 casos de personas que han sufrido violaciones y abusos contra los derechos humanos en este periodo. Ante esta situación, han insistido en la necesidad de reformar la Ley de Seguridad Ciudadana.

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El informe de Amnistía recoge en concreto cinco áreas distintas en las que ha habido abusos. Primero ante personas en situación de pobreza o que viven en la calle que han sido denunciadas por incumplir las medidas de confinamiento, en al menos Madrid, Valencia y Barcelona. La ONG destaca que en algunos casos, se han abierto incluso procedimientos penales. Pero también ha documentado violaciones de derechos en  arbitrariedad policial,  obstaculización del trabajo periodístico, en el uso desproporcionado de la fuerza por parte de la policía con tintes racistas y en registros de domicilios sin orden judicial.

Ante estos casos, AI ha pedido que se investiguen las denuncias y situaciones de abusos y violaciones de derechos humanos atribuidas a miembros de las fuerzas de seguridad y que se elabore un informe que evalúe la actuación de las fuerzas de seguridad durante el Estado de Alarma, en especial sobre grupos vulnerables. Pero además plantean la necesidad de incorporar mecanismos independientes de investigación y rendición de cuentas como los que ya existen en países como Bélgica, Reino Unido, Irlanda o Noruega.

Y finalmente solicitan que se lleve a cabo una reforma urgente de la Ley Mordaza para garantizar el pleno disfrute de los derechos a la libertad de expresión, reunión, manifestación y acceso a la información para toda la ciudadanía. La Ley de Seguridad Ciudadana, conocida como Ley Mordaza, lleva vigente desde el 1 de julio de 2015 por lo que acaba de cumplir 5 años. Y desde su entrada en vigor ha restringido de forma ilegítima derechos. En este sentido, Esteban Beltrán, director de Amnistía Internacional en España ha destacado que: “Una de las lecciones más importantes que nos ha dejado el Estado de Alarma es que hay que reformar de forma urgente la Ley Mordaza, eliminando los artículos que limitan el ejercicio de derechos humanos como la libertad de reunión, expresión e información”.

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