Henry de Laguerie  es el autor del libro «Les catalans» en donde trata de explicar, con una mirada de extranjero, las características, historia y peculiaridades del pueblo catalán al público francés. El corresponsal de Europe 1 que también escribe para diarios como Le Parisien o La Depêche du Midi resalta en radiocable.com que los catalanes han destacado por traer a España muchas innovaciones a lo largo de la historia y que su éxito económico, cultural y hasta deportivo ha aportado mucho valor añadido al resto del país. Señala que sin embargo esta visión no suele aparecer en la «opinión publicada» española y que aunque es cierto que España se ha descentralizado mucho, no se ha llegado a «aceptar culturalmente».

Henry de Laguerie explica que el libro fue un encargo de una editorial francesa para su colección que tiene la pretensión de dibujar a los pueblos del mundo: «Está pensado para el público francés y pretende a través de 16 entrevistas o retratos personajes catalanes conocidos o desconocidos dar una fotografía de cómo son. Yo lo hice pensando en que en Francia, al ser un país tan centralista, se entiende con muchas dificultades el hecho catalán y sus reclamaciones.»

El corresponsal destaca aspectos del carácter catalán como el amor por la vanguardia y el emprendimiento: «Muchos artistas españoles, deportistas o gente que produce mucho valor añadido para España son de Cataluña. Yo cito a los hermanos Roca de El Celler de Can Roca, pero muchas de las cosas innovadoras en la historia de España han llegado primero a Barcelona y luego al resto del país desde Dalí a Gaudí, y otros que lo siguen haciendo pero no son tan conocidos. Los catalanes son un pueblo bastante vanguardista, que siempre mira hacia el futuro y al exterior. Aunque también hay un arraigo muy fuerte hacia la tierra. Y luego son muy emprendedores, históricamente ha habido mucho interés por crear empresas y producir riquezas».

En cuanto a si esta visión de los catalanes es percibida también en el resto de España Henry de Laguerie asegura: «Creo que hay una diferencia entre lo que opina la gente en general y la opinión publicada. En los medios no interesa mucho hablar así de Cataluña. Y es paradójico, porque a Madrid y al resto de España le viene muy bien que Cataluña vaya bien a nivel económico, cultural o deportivo porque al final son éxitos para España, pero al mismo tiempo se ve como una competencia, dentro del mismo estado. Me llamó la atención que el PIB de Madrid en los años 60 era el 12% sobre toda España y Cataluña el 20%. Ahora ambos son el 20%. Eso es porque ha habido una política muy fuerte, igual no para frenar a Cataluña, pero si para equilibrar las cosas entre Madrid y Barcelona.»

En el libro también se habla de malentendidos e incompresiones entre Cataluña y el resto de España y el corresponsal cree que la raíz del problema actual con Cataluña está en el recurso contra el Estatut: «Ni Cataluña consiguió todo lo que quería entonces, ni Madrid, pero ambos hicieron un esfuerzo por alcanzar un mínimo consenso. Y al final el TC se lo quitó, cuando algunos artículos los tenían otras Comunidades Autónomas. Me da la sensación que esto ha sido nefasto y devastador.»

Y añade: «Lo que vi con el libro es que la autonomía de Cataluña es enorme y aún asi quieren más. La primera reacción es pensar, `estos siempre quieren más´. Pero cuando lo estudias bien te das cuenta de que es verdad que Madrid se ha descentralizado muchísimo, pero nunca lo ha aceptado culturalmente. EN Francia se pudo hacer un país centralizado porque estaba París y luego el desierto, entre comillas. Pero en España no es así. Barcelona es incluso más antigua que Madrid, es muy difícil tener esta cultura centralizadora.»

 

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