El resultado del 28M y la posterior convocatoria de elecciones generales para julio ha tenido un efecto colateral que no está pasando desapercibido para los medios internacionales: que la presencia de Vox en el poder no se contemple como algo imposible, ni como un problema y se haya «banalizado» o «normalizado» a la extrema derecha. Algunos como The Guardian alertan de que esto es «aterrador» y un peligro para toda Europa mientras otros medios analizan cómo puede afectar a la política española. Pero en general se subraya que Vox ha salido reforzado como «partido mainstream» y su influencia tras las generales puede ser alta o incluso integrar el gobierno.

The Guardian señala a España como el último ejemplo de auge de la extrema derecha y dice: «que eso sea normal, es aterrador». El diario británico, en una columna de Owen Jones, sostiene que el cortafuegos que existía en Europa entre la extrema derecha y la corriente «mainstream» se está derrumbando y se está dando un proceso de «normalización» similar al registrado con Donald Trump. Resalta que esto ha hecho que parezca «normal» hablar de eventos extremos como una guerra civil en EEUU o un dictadura de derechas. Y pone de relieve, ejemplos como el éxito del FPO en Austria, cuya primera entrada en el gobierno a principios de siglo desató grandes protestas en toda Europa y sanciones, mientras que ahora gana elecciones y podría ser el primer partido del país. Pero subraya en particular también el caso de España, donde Vox emergió en 2019 con un discurso «hostil a los migrantes y las autonomías» como tercera fuerza política y podría llegar al gobierno en las generales de julio, siendo la primera vez que la extrema derecha está en el poder desde Franco. Y asegura: «salvo que la extrema derecha vuelve a ser tratada como políticamente intolerable, nos esperan nuevos horrores».

The Financial Times subraya que el papel de Vox como «hacedor de reyes» en España copa la atención. El periódico británico apunta que la perspectiva de una extrema derecha presente en gobiernos autonómicos dominó el inicio «no oficial» de la campaña electoral de las elecciones generales de julio, «a pesar de que la oposición conservadora intentó que el foco estuviera en otro lado». Se hace eco de que la formación «ultra-conservadora» Vox tendió la mano al PP para hacer coaliciones donde no hubieran obtenido mayoría absoluta, pero Núñez Feijoo intentó «ignorar el asunto». Señala que a las dos formaciones le «une la convicción de que Sánchez ha devaluado las instituciones y la hostilidad hacia los independentistas catalanes y vascos», pero señala que hay asuntos que les dividen. Recuerda en este sentido que Vox ha calificado al PP de «sumiso partido del establishment» adoptando posiciones sobre migración, feminismo y globalización «incomestibles» para muchos conservadores. Y apunta que Feijoo «hará todo lo posible» para evitar la visión de que pueda ser presidente y tener a Abascal de nº2 antes del 23J.

Le Figaro que en España se ha completado «la banalización e institucionalización de la extrema derecha». El rotativo francés explica en un artículo de Mathieu de Taillac que tras su victoria en el 29M, el líder del PP, Alberto Núñez Feijoo anunció que había hablado con Santiago Abascal, líder de Vox, con el que está llamado a entenderse para formar gobiernos de coalición municipales y autonómicos. Y pone de relieve que estas elecciones han terminado así de completar «la banalización e institucionalización de la extrema derecha en un país en el que el concepto de cordón sanitario nunca se tomó en serio, ni en la izquierda, ni en la derecha».

The Spectator destaca a Vox como el más derechista de los partidos mainstream españoles y analiza cómo puede influir en el PP. El semanario conservador británico recoge que el 28M ha sido una «excelente noche» para el PP, pero también ha reforzado considerablemente a Vox, «el más derechista de los partido mainstream». Y subraya que todo indica que puede tener una gran influencia e incluso entrar como socio minoritario en el gobierno central tras el 23J. Algo que, enfatiza, «cambiaría radicalmente la vida política en España». Sostiene que Vox «no es fascista, pero siempre está encantado de desafiar los consensos», es el «más euroescéptico» de la política española, tiene una posición «inflexible -xenófoba, según la izquierda-» sobre la inmigración y por encima de todo defiende con orgullo los valores tradicionales católicos. Y plantea que una coalición con Vox «podría ayudar al PP a decidir qué defiende» tras unos años de «crisis de identidad», por el auge de la formación de Abascal, en los que solo ha conseguido dar «bandazos».

Advertencia: Por respeto a la ley L.P.I. española, radiocable.com ni reproduce textualmente ni publica links a los textos externos que han llamado la atención de nuestro equipo. Si desea conocer la literalidad del artículo acuda directamente al medio referido. 

linea

Radiocable.com y su programa La Cafetera se financian con las aportaciones de lectores y oyentes. Necesitamos tu ayuda para sobrevivir. Si te gusta el periodismo que defiende el programa y sientes que te acompaña, hazte suscriptor-mecenas aquí.

linea

Print Friendly, PDF & Email