El Gobierno que preside Javier Lambán ha comenzado a censar calles, monumentos y menciones honoríficas dedicadas a la dictadura y a sus protagonistas activando la cuenta atrás para que desparezcan todos los símbolos franquistas de la región antes del 22 de agosto. En esta fecha termina el plazo de 18 mese que dada la Ley de Memoria Democrática aprobada en Aragón.

estatua contraluz

El Consejero del Departamento de Educación, Cultura y Deporte aragonés, Luis Faci, ha explicado, según recoge un artículo de Eduardo Bayona en Público, que los agentes de Protección del Patrimonio están llevando a cabo la creación del censo de símbolos franquistas y se está pidiendo por carta a las instituciones, civiles y eclesiásticas, que los retiren.

La Ley de Memoria Democrática de Aragón se aprobó en noviembre de 2018 y fijó un plazo de dieciocho meses para la retirada del espacio público de los elementos contrarios a la memoria democrática. Esto incluye placas, escudos, insignias, inscripciones, anagramas y otros elementos sobre edificios públicos o situados en la vía pública, así como denominaciones de calles, vías o lugares públicos que rindan homenaje a militares o políticos afectos al golpe de estado o al régimen franquista.

La no retirada de estos símbolos conllevaría tanto para particulares y entidades públicas como privadas eventuales sanciones por enaltecimiento del franquismo y la pérdida del derecho a obtener subvenciones, bonificaciones o ayudas públicas de la comunidad.

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