[28-8-2007] El periódico italiano Corriere della Sera publica un artículo sobre la asignatura de educación para la ciudadanía. Fuera  -hemos visto algún ejemplo en la prensa Rusa- choca bastante la oposición que ha suscitado esta asignatura. Y llama la atención que incluso sorprenda allí, en Italia, en una sociedad tan poco progresista como esa.

�??Ahora en España se estudia educación cívica. Pero los padres y la Iglesia se rebelan�?�. […] �??En Italia. Nacida con Aldo Moro, sobrevive sin votos. La educación cívica en Italia nació en 1958, cuando fue ministro de instrucción Aldo Moro. Surgió en la enseñanza elemental y media y desde entonces, ha estado en todas las reformas siguientes […]

�??Una nueva categoría de objetores de conciencia está a punto de unirse en España a los médicos contrarios al aborto […] �??Una �??mala educación�??, según la Conferencia Episcopal y el Partido Popular, que acusan al Ministerio de Educación y al Partido Socialista de querer instalar, en los más jóvenes, ideas demasiado progresistas en materia de eutanasia, homosexualidad, inmigración, embarazo, y familias ampliadas. Una �??introducción en los valores cívicos y en los derechos humanos�??, según el gobierno, que ha querido por el contrario llenar una laguna en los programas escolares, herederos del régimen de Franco: �??La educación cívica […] enseña solamente la libertad�?� […]

�??El arzobispo de Toledo, Antonio Cañizares, ha hecho una llamada a las familias de los alumnos para que �??no colaboren con el mal�??. La presidente de la Comunidad de Madrid, (equivalente a la Provincia italiana), Esperanza Aguirre, igualmente contraria, ha decidido utilizar su facultad de posponer hasta el año próximo la introducción de la nueva materia, dado que «entonces el Partido popular habrá vencido las elecciones y la ley habrá sido cambiada.»

No deja de extrañarme que la gente defienda con tanto ímpetu la libertad para ser un mal ciudadano.