César Strawberry tras su condena: «No voy a callarme, aunque se le antoje al Tea Party español»

El cantante del grupo Def con Dos, César Strawberry, fue entrevistado en La Cafetera de radiocable.com tras ser condenado a 1 año de prisión y 6 años y medio de inhabilitación, que le » impide ser funcionario». Strawberry aseguró: «Seguiré luchando por mi inocencia, no voy a callarme aunque se le antoje al Tea Party español».

«Esto es ilegal«, denunció César Strawberry. Porque, según «la legislación europea, el delito de odio exige ser muy meticulosos y que se contextualice, para lo cual es imprescindible que el acusado se explique». Mientras que a él no se le «ha permitido comparecer».  El cantante considera que «el Tribunal Supremo ha contravenido las normas internacionales sobre delitos de odio impidiéndome explicar esto».

César Strawberry califica lo ocurrido como «un ataque a la cultura de vanguardia». «Es un camino muy peligroso del cual ha hecho bandera la ultra derecha, el Tea Party«.

La sentencia la recibió «con cierta sorpresa y estupor pero con calma«, añadió.»Soy consciente del país en que vivimos y de la injerencia política que hay en las instituciones del Estado».

Strawberry desconoce por el momento si será obligado o no a entrar en prisión». Es la Audiencia Nacional la que lo decide». César Strawberry insiste en que se han vulnerado sus derechos porque no se le «ha permitido comparecer». Lo que «va en contra de la legislación europea, que exige que, en el caso de que se de la vuelta al caso, al menos se de la oportunidad de comparecer» al acusado.

«Querían meterme injurias al rey para añadirme cuatro años de cárcel», lamentó César Strawberry, que denunció además la doble vara de medir que se emplea en España para perseguir las ofensas en la red: «vemos cómo Pilar Manjón fue insultada por Jiménez Losantos y eso se ha sobreseído y considerado libertad de expresión».

Pese o lo ocurrido Strawberry defiende que «hay grandes juristas y gente muy honesta» en la justicia española. «Pero», señaló: «También hay enquistados una serie de elementos heredados del tardofranquismo para dar de vez en cuando ese tipo de sorpresas que rozan la manipulación por un antojo ideológico». Y considera que la Fiscalía está «ideologizada».

«Se me ha vigilado porque a determinados mandos no les gusta mi perfil», aseguró. «Me han aplicado ‘el derecho penal del enemigo‘». Y recordaba cómo «durante 1 año un policía estuvo vigilando en la puerta» de su estudio.