El pretigioso semanario britancio analiza el caso de Tipos Infames, una librería de Madrid que tuvo que esperar tres años para obtener las licencias necesarias para poder abrir. The Economist asegura que España debería tener más empresas como esta y defiende reformas estructurales en nuestro país y en Europa para favorecer a los emprendedores.

La libreria Tipos Infames
(Foto: Flickr/llitlekstopbythecorner)

El artículo explica: «Tipos Infames es una fina librería en el centro de Madrid, dirigida por tres jóvenes amigos y llena del tipo de libros que siempre quisiste leer, hasta que el trabajo y los niños se interpusieron en el camino. Conscientes de que el intelecto necesita estímulo suave, los dueños te engañan con un café fuerte y generosos vasos de vino español. Y se cita a uno de los fundadrores «Curro» Llorca, explicando que son tiempos difíciles para llevar un negocio, pero que les va aceptablemente.

Luego The Economist detalla los problemas que tuvieron para montar la librería: «Curro y sus amigos necesitaron tres años para poder abrir. Tuvieron obtener una montaña de distintos permisos, uno para vender libros, un segundo para vender café y un tercero para vender vino. El ayuntamiento les dijo que no se preocuparan y aconsejó a Curro que abrieran sus puertas mientras esperaban los trámites. Pero los empresarios en ciernes se preguntaron qué harían si la policía se presentaba.»

«Atormentada por el desempleo, España necesita nuevas empresas como Tipos Infames. Sin embargo, en el ranking del Banco Mundial que evalúa lo fácil que es iniciar un negocio en cada país, situa al país en el puesto 133, después de Kenia. Junto a sofocar la crisis, la tarea más importante que enfrentan las economías de Europa es crecer, porque sólo entonces finalmente serán capaces de pagar sus deudas. Para ello, necesitan mejorar su competitividad. Y el mejor camino para mejorar la competitividad es racionalizar el sector público y reformar los mercados de mano de obra y servicios.» sostienen.

El artículo pone a España y su burocracia como ejemplo de las reformas y medidas que a juicio de The Economist serían necesarias y que podría llevar a cabo Rajoy -al que dan como proximo presidente-: «Lo que hace que la burocracia de España especialmente venenosa es el segundo enemigo del señor Rajoy: la fiereza independentista de las regiones del país. Cada uno tiende a interpretar las normas a su manera, por lo que con el paso del tiempo el mercado español se ha fragmentado«.

«Juan José Güemes, un político del PP y profesor de IE Business School en Madrid, explica cómo el sistema de calificación de estrellas para hoteles difiere ligeramente en toda España, lo que limita la competencia entre las cadenas nacionales e internacionales, y reduce las economías de escala. El año pasado el gobierno catalán decretó que los hoteles deben servir pa amb tomàquet, pan con tomate, una especialidad local, si es que querían ser considerados como `de lujo´» , recogen.

Para The Economist: «cada gobierno reformista de Europa se enfrenta a diferentes obstáculos, pero España es un caso típico de todos ellos en el sentido de que las radicales reformas estructurales implican reescribir el contrato social. Ahora mismo el generoso salario de muchos de los puestos de trabajo protegidos de España están sosteniendo a familias enteras de cónyuges desempleados y niños adultos. Desguazar las miles de reglas burocráticas no solo haría más eficiente la economía, sino también reformaría las relaciones entre el gobierno y los ciudadanos. «

Print Friendly, PDF & Email