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Fernando Berlín, el autor de este blog, es director de radiocable.com y participa en diversos medios de comunicación españoles.¿Quien soy?english edition.

El periódico británico The Economist publica un artículo titulado ???Empresas españolas: ¿grandes en Estados Unidos??. Según el texto, ??Empresas españolas esperan beneficiarse del plan estadounidense de estímulo?.El Texto ha sido recogido por el diario EL PAIS, que destaca que el diario británico afirma que «a pesar del optimismo, no cree que los españoles puedan aprovechar mucho».

??Las empresas norteamericanas no son las únicas en confiar en medrar gracias al plan de estímulo económico de Barack Obama. Las compañías españolas también están tomando posiciones para beneficiarse de lo que llaman el plan Obama . Otras empresas extranjeras están empujándose para conseguir algo de los 317.000 millones de dólares en gastos previstos, pero España es el único país que ha organizado una campaña en torno a ellos?.

??Las compañías españolas consideran que están especialmente bien situadas para beneficiarse del estímulo norteamericano porque dos de los principales pilares del esquema son gastos en energías renovables y en el sector de las infraestructuras, en los que España es especialmente fuerte. EEUU pretende duplicar su producción de energía a partir de fuentes renovables en los tres próximos años. Iberdrola, la mayor eléctrica española, es líder mundial en energía eólica y la segunda operadora en EEUU tras Florida Power and Light. Otras dos grandes compañías españolas, Acciona y Abengoa, también están activas en ese campo?.

??El momento es adecuado por otras razones. La relación de España con la anterior Administración estadounidense se cargó de tensión después de que España retirase sus tropas de Irak en 2004. La llegada de Obama representa algo así como un borrón y cuenta nueva, aunque la reciente retirada unilateral de solados de Kosovo sin previa advertencia no ha sentado demasiado bien en Washington. Pase al optimismo, sin embargo, España probablemente no debería depositar demasiadas esperanzas en el plan Obama. Incluso si firmas españolas logran algunos grandes contratos, la mayor parte de los empleos serán para estadounidenses, no para españoles, y tendrán que pagar impuestos en EEUU. Cualquier beneficio será reinvertido por las compañías españolas o pagados como dividendos a los accionistas, algunos de los cuales son extranjeros. Apostar demasiado también conlleva riesgos, incluso reacciones proteccionistas. El paquete de estímulo ya incluye disposiciones de ??compre estadounidense?? para la adquisición de determinados materiales, como acero.

??Aunque algunas empresas están contentas dejando que España cabildee en su nombre, otras son renuentes a hacer ondear la bandera. A menudo compiten con fiereza con otras empresas españolas por contratos. Y otros gigantes españoles prefieren que se las vea como compañías mundiales con presencia local en EEUU. Prefieren resaltar su experiencia en determinados sectores y minimizar su nacionalidad?.

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