Todos los españoles sabemos que los ciudadanos Estados Unidos de América son ejemplo de ignorancia y analfabetismo, en comparación con nuestra excelente media intelectual, claro está.

Debe ser porque a que ellos cursan en el bachillerato algo muy parecido a Educación para la Ciudadanía llamado U.S. History and Government.

Sé que no es ortodoxo, pero sirva de ejemplo que yo mismo, que leo los periódicos todos los días, me relaciono con abogados y periodistas constantemente, que éstudié medicina, y varios master de gestión de empresas, sé más del sistema político y de valores de EE.UU. que de España, precisamente por haber cursado esa asignatura, que no era precisamente adoctrinamiento sino una clase de debate, donde lo importante era conocer la ley y el espíritu que la inspira, y formarse una opinión fundada y seria, aunque fuese completamente contraria a la propia ley.

Un sector de esta España, de nuevo paradigma de la pureza, pretende dejar en la ignorancia del contexto constitucional, legal y de valores del país que compartimos a la enorme mayoría de la población; reservando estos conocimientos y reflexiones a las élites ilustradas, y a la Iglesia  ¿pero qué les ha hecho el pueblo para merecer tal castigo?

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