El diario estadounidense recoge en una crónica de su corresponsal Raphael Minder la polémica colocación de un avión en el monolito en honor a Carlos Fabra en el aeropuerto «hacia ninguna parte» de Castellón. Ironizan sobre cómo «finalmente ha llegado un avion al aeropuerto aunque no a las pistas». Y hablan de una nueva vuelta de tuerca en la historia de este proyecto que consideran un «símbolo del despilfarro» en España. El propio New York Times y también The Guardian ya habían detallado con anterioridad la «megalomanía» del proyecto.

El artículo del New York Times

El New York Times destaca: «Un avión ha llegado finalmente al aeropuerto «fantasma» de Castellón. Aunque en lugar de colocarse en la pista,  el avión, un modelo de aluminio, coronó esta semana la cima de una estatua gigante en el camino de entrada al aeropuerto -otra vuelta de tuerca en la historia de un proyecto de 183 millones de dólares que se ha convertido en un símbolo del despilfarro que ha hundido a España en una profunda recesión y crisis bancaria.»

Explican: «la estatua, de 79 metros de altura y con un presupuesto de 375.000 dólares,   supuestamente debía homenajear a Carlos Fabra, presidente durante mucho tiempo del gobierno regional de Castellón y la fuerza impulsora tras el proyecto del aeropuerto. A pesar de que el aeropuerto no ha logrado atraer ni un solo vuelo programado, Fabra ha defendido incondicionalmente su proyecto. En marzo de 2011, incluso sostuvo que tendrían una oportunidad única de convertir el aeropuerto en una atracción turística.»

El diario resalta que «dentro del boom de construcción y burbuja inmobiliaria que vivió España durante más de una década, se hicieron aeropuertos, autopistas y líneas de ferrocarril, a menudo bajo la presión de los políticos regionales que buscaban una mayor presencia dentro de la red de transporte nacional. Muchas de las carreteras de reciente construcción están ahora desiertas, y sólo una quinta parte de los aeropuertos de España obtuvo beneficios el año pasado.»

[Leer el artículo completo en The New York Times]

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